El PP de Bembibre solo ve «beneficio personal» en el pacto PSOE-UPL después de ocho meses
Los populares reiteran sus críticas a la gestión del equipo de Gobierno y le piden transparencia sobre el contenido del acuerdo.
El Partido Popular de Bembibre ha pedido claridad sobre el pacto de gobierno entre PSOE y UPL en la Villa del Boeza, señalando que ocho meses después de las últimas elecciones municipales “seguimos sin conocer los acuerdos entre el PSOE y la UPL que han permitido gobernar al Partido Socialista con seis concejales”.
Los populares aseguran que “siguen siendo un enigma los grandes puntos supuestamente acordados para la mejora del municipio, más allá de aquellos que repercuten en su beneficio personal”. En ese sentido, desde el PP apuntan las “notables” subidas de los sueldos tanto de la alcaldesa, Silvia Cao, como del portavoz de UPL, Sigifredo Benavides.
“El salario de Silvia Cao en los últimos 4 meses, entre Ayuntamiento y mancomunidades, ha mejorado su promedio de los 4 meses anteriores, pasando de los 3.172,91 euros al mes a los 3.519,84 euros mensuales, todo ello sin tener en cuenta la subida de la nómina a partir de enero que se aplicará en su momento con efecto retroactivo. El caso del concejal de UPL, Sigifredo Benavides, es todavía más notable. Sus retribuciones entre Ayuntamiento y mancomunidades se han incrementado desde los 1.420 euros al mes hasta los 1.895 euros que ha percibido de media en los últimos 4 meses”, afirman los ‘populares’ en su comunicado.
Por el contrario, desde el PP recopilan una serie de “logros” del gobierno bembibrense, entre los que señalan el “pago de desproporcionados arrendamientos por dos aparcamientos”, la subida de tasas, la negativa a aplicar el convenio colectivo “que por derecho corresponde a 43 trabajadores municipales”, la aprobación de una plantilla de personal “que no coincide en número con la Relación de Puestos de Trabajo” o la “dejadez, desinterés u ocultación de todo lo concerniente a los posibles riesgos de lainstalación en el Polígono Industrial de una actividad sumamente contaminante, peligrosa y que requiere un volumen de consumo de agua potable que Bembibre no tiene
