[REVISTA] Ganar en Lugo con un varal para opinar de la agenda

«Lo más grave que le puede suceder a una sociedad libre y democrática es tener miedo a opinar en voz alta. Y a eso hemos llegado”, sostiene Javier Marías.

Después de cuatro décadas y media ejerciendo el oficio de contar noticias y opinar sobre ellas, no podemos estar más de acuerdo con el escritor que se reconoce «un cascarrabias». Ni siquiera vamos a quejarnos del precio pagado por ello. Eso sí, nos sigue provocando cierto pasmo que algunos dirigentes políticos se sientan ofendidos por las críticas que consideran injustas (y acaso lo sean muchas veces). Vamos a tomarlo con humor y para ello les proponemos un juego con dos titulares del pasado fin de semana. En uno dice Ramón: «Es el momento idóneo para mostrar el equipo que somos». Y en el otro, apunta Ramón: «Hoy puede ser la meta de lo que queremos llegar a ser». Es otro Ramón, evidentemente.

El efecto de la crisis del PP surgida en Madrid llega ya a todos los territorios, pero aquí de lo que se habla es de que Mañueco confía “plenamente” en Ciudadanos e insiste en que quiere “agotar la legislatura”. Entretanto, Lambán también se lo piensa: el presidente de Aragón sopesa adelantar las elecciones.  A escala estatal, según el ElectoPanel (7N): UP sigue al alza, el PP pierde apoyos. Pero volviendo a la batalla de Madrid, Ayuso blinda a Rodríguez y envenena su relación con Casado y Egea: “Sin MAR, ella no sería lo que es”. Hay quien sostiene que la Guerra total entre Casado y Ayuso por el control del PP de Madrid comenzó con la gestión de la pandemia,

Nos provoca pasmo que algunos políticos se ofendan por las críticas

Quizá eso sea precisamente lo único que tengamos que agradecer a Ayuso y su asesor áulico, Y es que los talibanes no se cansan nunca: Sagardui no descarta volver a las restricciones para Navidades si la situación continúa empeorando. Parece que lo están deseando los cómplices del Gobierno que secuestró a sus propios ciudadanos bajo la excusa de la salud, falsa dicotomía propia de totalitarios, con aquel estado de alarma tan jaleado por los grandes medios de comunicación. A veces se hace difícil sustraerse a la impresión de que la prensa está trabajando deliberadamente para destruir su propia credibilidad. Casi mejor que se fueran de magosto con Tarsicio a remover castañas con un baral (se ve que su famoso corrector no trabajó ayer).

Sergi Enrich desata el delirio berciano en el Anxo Carro, con su primer gol como blanquiazul. No podía tener mejor estreno. Para Bolo: «Es un premio a la valentía, nos volcamos aunque pudieran pillarnos». Es cierto que la Deportiva, espoleada desde las gradas por los aficionados que se desplazaron a Lugo (en un número todavía modesto comparado con los de antaño), fue a por todas. En su situación, puede permitirse el lujo. También el Rayo, por ejemplo, que a punto estuvo de darle un susto al Real Madrid. Había cuentas pendientes como las de Isi Palazón: «No me gustaron las formas con las que me echó el Real Madrid».

Terminamos con una referencia a La España vacía de ministros: el 80% de las provincias no aparecen en sus agendas. Esta comarca (o lo que sea) tampoco aparece apenas en las agendas de los consejeros de la Junta.