[SUJETO DE ABAJO] Contexto
JUAN CARLOS SUÑÉN | Vuelvo a leer El Quijote, es la quinta vez; la última lo hice persiguiendo la idea de que no se puede vivir en un mundo investido de los valores de otro, y aún menos cuando estos son más literarios que reales, de que el ideal idealizado no funciona; ahora lo hago como la primera: sin asombro no hay juventud ni vejez (que el asombro, si sirve a la curiosidad, no es incómodo escándalo sino experiencia grata).