Cesefor y Junta presentan un plan de restauración del hábitat del oso pardo en el Bierzo
El encuentro pretende abordar también el proceso de escalamiento de proyecto al área completa de la Cordillera Cantábrica.
El encuentro pretende abordar también el proceso de escalamiento de proyecto al área completa de la Cordillera Cantábrica.
En pleno invierno, la actividad osera sigue presente en la comarca, donde esta semana un apicultor se puso en contacto con el Fondo para la protección de los animales salvajes (Fapas) para comunicar que su colmenar estaba siendo visitado cada noche por un oso, con la destrucción en cada una de esas visitas de una o dos colmenas.
El ejemplar ha causado daños en huertas y frutales de las localidad de Tejedo y Villarino, en el municipio de Páramo del Sil.
El equipo veterinario efectuó un disparo con dardo que consiguió en 12 minutos una anestesia profunda del ejemplar, de 98 kilos.
Castilla y León alberga el 53% de la población de osos con una estimación de 197 ejemplares, de ellos 108 en el occidente leonés.
El studio de la población de osos pardos en la Cordillera Cantábrica mediante técnicas genómicas y modelos de estima poblacional de captura-recaptura ha sido realizado por las comunidades autónomas de Galicia, Asturias, Cantabria y Castilla y León junto con la coordinación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) y la Universidad Autónoma de Barcelona y el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (CSIC-UCLM-JCCM).
El ejemplar encontrado en mayo con un peso de 3,8 kilogramos ha alcanzado los 37 de forma previa a su reintroducción.
Recuerda las indemnizaciones por daños en las colmenas y la existencia de subvenciones para instalar pastores eléctricos.
La Junta no considera prioritario mantener las restricciones en vigor desde el pasado viernes.
El ejemplar de oso pardo, que ya pesa 30 kilos, se encuentra desde la semana pasada en el recinto de aclimatación de Valsemana.