Una empresa del Grupo Martínez Núñez fracasa en su intento de cobrar intereses a Hacienda
La Audiencia National da la razón a la Agencia Tributaria en un enrevesado pleito con Gallega de Molienda de Clínker.
La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional ha dado la razón a Hacienda frente a Gallega de Molienda de Clinker, empresa del Grupo Martínez Núñez presidida hasta 2009 por el berciano Ramón Blanco Balín, que pretendía cobrar intereses de demora por deudas por importe de más de 2 millones de euros no ejecutadas en tiempo. La sociedad aparecía en diciembre de 2021 en el listado de grandes morosos con Hacienda con una deuda de 6,3 millones, que se ha incrementado hasta algo más de 9 millones en la publicada el pasado mes de junio.
El Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo número 10 estimó en mayo del año pasado un recurso interpuesto por Gallega de Molienda de Clinker, que se sustanciaba en “la inejecución de un acto administrativo firme, consistente en el acuerdo liquidatorio de 2013 dictado por la Dependencia Regional de Inspección de la Delegación Especial de Galicia de la Agencia Tributaria derivado del acta de disconformidad por el IVA declarado en el ejercicio de 2010, con resultado de dos millones de euros”. El juez condenaba así a la Agencia Tributaria a pagar a la empresa la suma a que ascendiesen los intereses de demora devengados por esos dos millones de euros “desde 2013, fecha en que se dictó el acuerdo liquidatorio firme, hasta el momento en que se proceda a su pago efectivo”.
El enrevesado proceso, tras pasar de los juzgados de lo Penal y de Instrucción de Ferrol y Santiago al Mercantil de A Coruña, llevó en su día a que la liquidación del acta de inspección, esos dos millones, no fueran ejecutados por la Agencia Tributaria. Gallega de Molienda de Clinker, bajo tutela de un administrador concursal desde 2010, aprovechó el escenario. Ahora, en una sentencia del pasado mes de julio, a la que ha tenido acceso Economía Digital Galicia, la instancia superior, la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional estima el recurso interpuesto por la Agencia Tributaria y tumba las pretensiones de la empresa.
Gallega de Molienda de Clínker pertenecía aL Grupo Martínez Núñez, siendo su presidente y consejero delegado el berciano Ramón Blanco Balín, condenado en varias piezas de la trama Gürtel. Con fábrica en la localidad coruñesa de Coirós, comercializaba los cementos de La Estrella y estuvo envuelta en un proceso penal por no declarar y abonar los importes reales y las tasas aduaneras de sus importaciones. Un año después de su salida de la cementera, Gallega de Molienda de Clinker presentaba suspensión de pagos en el Juzgado de lo Mercantil de A Coruña.
En la última pieza de la Gürtel que se ha visto en los tribunales, la de Boadilla del Monte, Blanco Balín fue el que recibió una mayor pena de los tres bercianos procesados en la causa, concretamente dos años y cuatro meses de prisión por fraude, falsedad, cohecho y prevaricación. Los empresarios José Luis Ulibarri Cormenzana y José Luis Martínez Parra fueron condenados a año y medio de cárcel y dos años, respectivamente, por delitos como falsedad, blanqueo, cohecho o tráfico de influencias.
