Cabrera Despierta se suma al movimiento contra los macroproyectos eólicos

La inquietud y preocupación ante los macroproyectos industriales de instalación de molinos eólicos que se proyectan en la comarca ha provocado el surgimiento de un nuevo colectivo ciudadano que se opone frontalmente a estas iniciativas. Bajo el nombre de Cabrera Despierta, su objetivo principal es conseguir la declaración de la zona como Parque Natural, algo que consideran imprescindible para obtener una declaración ambiental que la proteja y evite que las multinacionales «tengan posibilidad de especular con ella, ni ahora ni en el futuro».

Hasta la fecha hay planificados tres macroproyectos eólicos en Cabrera, promovidos por las empresas Ebel Green Power y Green Capital Power, que se extienden de norte a sur por los cordales de los montes de Cabrera Baja y Cabrera Alta, ocupando la práctica totalidad de la sierra de Cabrera, de forma tanto física como visual. Estos macroproyectos suponen la instalación de 53 molinos de 200 metros de altura y varios más en estudio, dispuestos a lo largo de los cordales de las sierras. A esto hay que sumarle kilómetros de pistas de acceso de 6 metros de ancho y de las consiguientes subestaciones y líneas de alta tensión con torretas de 50 metros de altura para evacuar la energía producida hacia Zamora y Ourense.

De llevarse a cabo, señala Cabrera Despierta, estas estructuras serán visibles desde todos los pueblos «y afectarán de forma crítica a una comarca que ya sufre un deterioro ambiental y paisajístico muy grande por las canteras de pizarra, así como por los incendios, destruyendo de forma irreparable el territorio virgen que nos queda. En definitiva, significarán el fin de Cabrera tal y como la conocemos, pues dejaría de ser un área rural en un entorno de alto valor natural y arqueológico, para convertirse en un polígono industrial».

Cabrera Despierta asegura en un comunicado que nace «de la unión de vecinas y vecinos de distintos pueblos de Cabrera para hacer frente a lo que consideramos un ataque a nuestro medio natural, a nuestro paisaje, a nuestro patrimonio arqueológico, al desarrollo turístico, agrícola y ganadero así como a la forma de vida de nuestros pueblos. Nos mueve por tanto la firme determinación en la defensa de nuestro territorio y nuestros valores, y de un desarrollo rural sostenible. Este colectivo, surge también de una necesidad imperante de informarse y de informar sobre la realidad de estos macroproyectos y sus repercusiones en la comarca».

Aunque se declara a favor del desarrollo de las energías renovables, el colectivo matiza que «no de manera industrial» y entiende que la mejor forma de aplicar una transición energética en zonas como Cabrera es facilitar el autoconsumo y la gestión local de la energía a pequeña escala. «Este es el modelo que defendemos, y no como alternativa, sino como la única vía para que un desarrollo sostenible sea real y efectivo», recalca.

«No podemos consentir que nuestros montes se conviertan en polígonos industriales al servicio de multinacionales, que sirvan de energía a zonas lejanas, a costa de la destrucción de nuestra comarca. Consideramos que este supuesto “desarrollo verde” industrializado sólo traerá más despoblación, ya que no generará ningún empleo ni beneficio en la zona, alejando el turismo por el deterioro del paisaje, y perjudicando a otras actividades económicas de la comarca. Sólo beneficiará a las multinacionales que los promueven a costa del deterioro de la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras», enfatiza Cabrera Despierta.

La asociación efectúa un llamamiento a la población y a las instituciones de la comarca para que se posicionen «claramente en contra» de la instalación de estos macroproyectos en Cabrera y por extensión en toda la Cordillera Cantábrica y Montes Galaico Leoneses, y las invita a sumarse «a todas las acciones que se van a llevar a cabo para paralizar la instalación de estos macroproyectos industriales».