[ZASCAS] Cinco razones para no ir a la manifestación

Este domingo saldrán a la calle en Ponferrada cinco, diez, como mucho veinte mil personas, pero la inmensa mayoría de los bercianos y bercianas se quedarán en casa o harán lo que suelen cualquier día festivo.

Nada que reprocharles, seguramente tienen sus motivos para no ceder ante los cantos de sirena de las fuerzas vivas (si realmente lo estuvieran no habríamos llegado al punto en el que estamos) de la comarca, acuciadas ahora por la necesidad de hacerse un nuevo lavado de cara. Ahí van solo unas pocas de las muchas razones para darle la espalda a la convocatoria.

1. Víctimas y verdugos desfilarán juntos. ¿Nadie tiene la culpa de lo que le ha pasaado al Bierzo? Se diría que no. Partidos que han ocupado el Gobierno de la nación y/o de la Junta, sindicatos amamantados por la teta del poder y empresarios siempre ávidos de subvención pretenden legitimar su cuestionable actuación arropándose de una ciudadanía que ha sufrido las consecuencias de su vesania, rapiña o incompetencia.
2. Una melcolanza nauseabunda. Ver desfilar juntos, aunque no revueltos, a Vox y PCE o Podemos, a PP y PSOE, a Coalición por El Bierzo y UPL produce arcadas. Para completar la panoplia tenemos a empresarios, sindicatos, asociaciones de todo tipo, clubes deportivos y suponemos que la iglesia (católica, por supuesto), aunque a esta hora todavía no ha llegado su adhesión.
3. Llega demasiado tarde. El declive de la comarca es imparable. No es que lo digamos nosotros, lo pregonan a gritos todos los indicadores económicos y demográficos publicados en los últimos años. Basta salir a la calle para verlo. La manifestación no va a invertir esa tendencia. En realidad, seguramente no servirá para nada como las de 2016 y 2018.
4. No es necesaria para consttituir la Mesa. El objetivo esgrimido por los sindicatos de constituir una Mesa por el futuro de León con la participación del Gobierno central, la Junta y los agentes sociales (incluso estará el inútil Consejo Comarcal) ya está conseguido antes de la manifestación. Ahora, de lo que se trata es de vestirlo con una comparsa. Pero sea cuales sean las proporciones de la manifestación, eso no les dará más fuerza para negociar.
5. Da la espalda a la cuestión medioambiental. Por último, pero no menos importante, la manifestación obvia un problema de candente actualidad. ¿La reidustrialización que nos proponen patronos, sindicatos y partidos va ligada a proyectos tan sospechosos como Forestalia o la quema de neumáticos en Cosmos? Sin lugar dudas, a juzgar por sus declaraciones y sus acciones, sí. Y ese también es un motivo, cuando tanto se les llena la boca con el ecocidio, la emergencia climática y la transición energética, para darles la espalda a ellos, a los organizadores de esta mascarada.