Correa señala a Ulibarri y Teconsa por las ‘mordidas’ de Gürtel en Boadilla
El cabecilla de la trama declara que actuaba como «un lobby» que seleccionaba a los adjudicatarios de las obras.
Los nombres de los dos empresarios vinculados al Bierzo implicados en la pieza separada del caso Gürtel que comenzó a juzgarse este martes en la Audiencia Nacional no han tardado en salir a la palestra. Esta mañana, en la segunda jornada de la vista en la Audiencia Nacional, ha sido el propio cabecilla de la trama, Francisco Correa, el que se ha referido a José Luis Ulibarri y a la compañía Teconsa, de la que era vicepresidente José Luis Martínez Parra.
Correa ha definido la trama de adjudicaciones públicas en Boadilla del Monte como «un lobby» en el que él mismo «adjudicaba» licitaciones a empresarios que le aportaban «la cantidad correspondiente» en «dinero en efectivo» y ha afirmado en su declaración que conocía al constructor y magnate de medios en Castilla y León, José Luis Ulibarri, también acusado por cinco delitos que ya ha confesado, al igual que Martínez Parra y Ramón Blanco Balín.
De hecho, Correa aseguró que fue él quien escogió a Ulibarri para que el Ayuntamiento de Boadilla adjudicase a su empresa UFC una parcela para la construcción de viviendas por la que también se había interesado Sacyr Vallehermoso. La parcela, que se adjudicó por 35 millones de euros, llevó aparejada una mordida de un millón. «Me llamó el director, creo que era Luis Rivero, porque estaba interesado en la parcela, pero yo conocía a José Luis Ulibarri y se la llevó él. Le conocía desde hace muchos años», ha recordado. Correa ha reconocido que «es posible» que llamase él mismo al empresario. «Mi candidato era José Luis Ulibarri y se lo propuse a González Panero», entonces alcalde de Boadilla.
