Minuto de silencio en el campus de Ponferrada por el estudiante apuñalado en León
Dos crespones negros, un ramo de flores de sus compañeros de primero, y medio millar de estudiantes, han arropado a los padres de Mario Fuentes, el joven fallecido en la madrugada del domingo tras ser apuñalado en el pecho mientras hacía botellón en la zona de La Palomera de León.
Los padres han querido estar junto a los compañeros de su hijo en la concentración convocada a las puertas de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte para guardar un minuto de silencio en su recuerdo y para mostrar el rechazo a la violencia. Tras un largo minuto de silencio, los aplausos han dado fuerza y apoyo a los padres y a todos los compañeros de Mario Fuentes, al tiempo que Juan García ha dado las gracias por todo el apoyo recibido en nombre de los familiares.
“Ni en la comunidad universitaria ni en la facultad estábamos preparados para una situación así, nos ha roto los esquemas a todos y ahora solo podemos acordarnos de la familia, darles el pésame y nuestro máximo apoyo y a sus compañeros de curso que lo están sufriendo”, ha manifestado el decano al tiempo que ha querido recalcar que con esta concentración “hemos querido manifestarnos para rechazar la violencia y tener un momento de recuerdo a Mario que nos deja y no podremos olvidar en la facultad”.
Al igual que ellos, toda la comunidad universitaria (estudiantes, docentes y personal administrativo) se ha concentrado a las puertas del Rectorado y de los distintos edificios del Campus de Vegazana y del Campus de Ponferrada para expresar su pésame a los familiares, recordar al joven fallecido y manifestar su repulsa y condena a la violencia. La Universidad de León, en un comunicado remitido ayer a toda la comunidad universitaria, lamentaba el fallecimiento del estudiante y condenaba “las circunstancias violentas en las que esta muerte se produjo. Nuestra institución es un espacio cívico donde se trabaja con el convencimiento de que el respeto a la vida es un valor irrenunciable y, con toda determinación y firmeza, queremos manifestar nuestro rechazo a cualquier forma de violencia”.
El vicerrector de Profesorado de la Universidad de León, Miguel Ángel Tesouro, que participó en la concentración y minuto de silencio celebrado ante el Edificio del Rectorado, se mostró “sorprendido y angustiado” por lo ocurrido en el Campus, y en nombre de toda la comunidad universitaria se sumó al pésame a “familiares, amigos, compañeros y profesores del estudiantes” y lamentó que “sucedan estas cosas motivadas por la situación de pandemia y por la costumbre de los jóvenes de hacer botellones incontrolados”.
