[PÍLDORAS CONFINADAS] Caos en los aviones de humo parados
“O nosotros o el caos”, amenazaba la autoridad competente. “¡El caos, el caos!”, respondieron las masas enardecidas. “Es igual, también somos nosotros”, zanjó el preboste.
Nos recuerdan aquella impagable viñeta de Ramón en Hermano lobo en “O nosotros o el caos”: el Gobierno al fin se quita la careta. Y es que hay Alarma por el estado de alarma en el Gobierno, después de que PP y ERC hayan anunciado que no apoyarán mañana en el Congreso una nueva prórroga. El tedioso y triste ambiente del confinamiento al fin se anima un poco. Ahí están, ahí están Los frágiles números de Sánchez: la mayoría para la prórroga cuelga de un hilo. Ya lo dice Castelo (hoy va de viñetas): Rajoy seguro que tenía un plan b. Era muy de tener cosas en b, Mariano.
Desde ayer, Moncloa negocia con el PNV y barones del PP ceder competencias para salvar la alarma. También con Ciudadanos. Seguramente el PP no votará en contra y Sánchez salvará los muebles, pero todo apunta a que esta puede ser la última prórroga. Además, El Constitucional empieza este miércoles a estudiar el decreto del estado de alarma y lo mismo hay alguna sorpresa. No en vano, Catedráticos de Derecho Constitucional alertan sobre un uso «desproporcionado» del estado de alarma. Entretanto, con argumentos científicos y de la mano de expertos al menos tan reputados como los de aquí, Suecia deja que el virus se expanda.
El tedioso y triste ambiente del confinamiento al fin se anima un poco
La verdad es que sería una pena que se acabase el estado de alarma, ahora que nos hemos acostumbrado a las estimulantes arengas de Olegario Churchill y aficionado a las fantásticas producciones de la inagotable factoría de ficción de la Policía Municipal, que tanto se está esforzando para mantenernos entretenidos. Por cierto, el alcalde ruega a los medios que pidan las entrevistas y declaraciones por el conducto reglamentario y que no le agobien, que está muy ocupado manteniendo “continuas y largas reuniones presenciales y online”. Ya nos lo había advertido Jaime Gil de Biedma: “Que la vida iba en serio / uno lo empieza a comprender más tarde”.
Pero la noticia más sorprendente de ayer fue que Una compañía que repara motores de aviones estudia instalarse en el Bayo. De aviones de papel, quizá. Parece que los vendedores de humo no están confinados. Andan sueltos desde el cabo de Gata hasta Finisterre, que cantaba Pepe da Rosa. Así, El aeropuerto de Ciudad Real reconoce contactos con Willis para el proyecto que ha perdido Jerez. Más de lo mismo: Un grupo americano de reciclaje de aviones podría instalarse en el aeropuerto de Ciudad Real. Seguro que, aparte del Bayo, aparecen aún más novios.
Para colmo de males, parece ser que El Gobierno podrá fiscalizar los fichajes de la Ponferradina. Mejor lo dejamos, que hoy hemos de estar atentos a los datos del paro. Abróchense los cinturones que despega el avión de humo.
