CGT reclama investigar el elevado porcentaje de bajas en la planta de GE Vernova

Un informe del sindicato concluye que la mayoría de las ausencias están directamente relacionadas con las condiciones laborales.
Los altos porcentajes de absentismo laboral en la planta de GE Vernova Ponferrada (antes LM Wind Power) han llamado la atención de la sección sindical de la Confederación General del Trabajo (CGT), que elaboró un informe analizando las causas y su evolución en el período comprendido entre los años 2019 y 2024, con los datos que proporciona periódicamente la empresa.
Después de hacer un análisis de la evolución y una serie de comparativas, las conclusiones del informe señalan que la causa principal de absentismo son las enfermedades comunes (consideradas no laborales), mientras que los accidentes laborales o los permisos suponen una mínima parte del absentismo. Asimismo, se establece que la evolución del absentismo tenía una tendencia ligeramente al alza, pero a partir de agosto del 2021 (cuando se presentí un ERE para el 30% de la plantilla) se dispararon las enfermedades comunes y esa tendencia se mantiene hasta el 2024, alcanzando «porcentajes muy preocupantes», incluso más altos que los registrados en 2020 en plena pandemia.
El informe advierte de que con ello se dispara también el absentismo laboral, «Comparando el porcentaje de personas de baja por enfermedad en GE Vernova Ponferrada con la media de la población activa de Castilla y León multiplica por 7 u 8 el porcentaje; que las personas que trabajan el GE Vernova Ponferrada están expuestas a una serie de condicionantes por las propias condiciones del trabajo y por los productos que se usan», explican; La mayoría de las enfermedades son musculoesqueléticas y articulares, pero también respiratorias o alteraciones del sueño.
Las conclusiones del informa establecen que: la mayoría de las enfermedades comunes que sufren las personas que trabajan en GE Vernova Ponferrada tienen una relación directa con las condiciones laborales y, por ello, «deberían tener el mismo tratamiento que los accidentes laborales». Y es que, apostilla CGT, «esto supone para la persona afectada una pérdida económica, de derechos y además de la exposición a una mala curación de la enfermedad al valorar el origen de manera errónea». También supone, agrega, «un gasto inmenso para las arcas públicas tanto en gasto directo como en la saturación de la sanidad pública, en servicios tan precarios como traumatología, por ejemplo, aportando miles de casos que deberían ser atendidos por otros medios».
Con este informe, CGT pretende que la Administración, «que es quien tiene todos los datos y debe ser la garante de la salud de las personas», inicie una investigación y aporte soluciones «a este acuciante problema». El estudio fue presentado a la dirección general de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales, el Servicio de Seguridad y Salud en el Trabajo, la dirección general de Salud Pública y la Oficina Territorial de Trabajo de León.