El PSOE acusa a la Junta de permitir «salvajadas» como el parque eólico de Trabadelo
Javier Campos cree que el Gobierno autonómico no regula «de manera intencionada» el despliegue de energías renovables.
El procurador socialista berciano Javier Campos acusó este martes a la Junta de Castilla y León de no regular «de manera intencionada» el despliegue de energías renovables en la Comunidad y permitir «salvajadas» como el parque eólico de Trabadelo, «en pleno corazón del Bierzo Oeste entre las joyas medioambientales del Parque de Ancares y la Sierra de la Lastra».
Campos formuló en el pleno de las Cortes una pregunta referida al despliegue de las energías renovables, denunciando la falta de regulación de la Junta en esta materia que, dijo, «está siendo puerta de entrada a la corrupción y permite a empresas nacionales e internacionales hacer el agosto a costa de nuestros impuestos, patrimonio natural, histórico y modo de vida sin que el gobierno de Mañueco se inmute».
«Hace dos décadas que en Castilla y León el despliegue de las energías renovables va intrínsecamente unido a la desregulación y a la corrupción», afirmó, refiriéndose a la «salvajada» del parque eólico de Trabadelo como ejemplo de las graves consecuencias de la «intencionada y especifica falta de regulación de la Junta ante el despliegue de las energías renovables para más de 50 Mw», añadió.
«La Junta se ha limitado a elaborar un timorato informe no vinculante que casi mata de risa al promotor del parque eólico», denunció el procurador socialista, quien en su intervención expuso las graves consecuencias de un proyecto que «afectará al oso, al lobo, a aves protegidas como alimoches águilas, halcones y aves nocturnas, a fauna imprescindible para el control de plagas y el mantenimiento de la biodiversidad, además del del elevado y grave impacto al patrimonio histórico y cultural y de graves afecciones a los manantiales de abastecimiento de agua de las poblaciones que la Junta va a permitir por no legislar».
Finalmente, Campos acusó al consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, de «dejar indefensa a Castilla y León permitiendo atentados medioambientales contra nuestra tierra».
