[UNA HABITACIÓN AJENA] Efectos adversos
Cuando el estado de excepción se convierte en la regla, entonces el sistema jurídico-político se transforma en una máquina letal.
Cuando el estado de excepción se convierte en la regla, entonces el sistema jurídico-político se transforma en una máquina letal.
GERMÁN VALCÁRCEL | Cuando me entero de la presencia, en programas basura de TV como el de Ana Rosa Quintana, del científico del CSIC, Antonio Turiel, una de las personas que, en nuestro país, mejor puede y sabe explicar la crisis energética global que padecemos -algo sobre lo que lleva avisando casi dos décadas- empiezo a sospechar que las tesis “decrecentistas-colapsistas” comienzan a salir de las catacumbas.
EDUARDO FERNÁNDEZ | Por la foto, lo que sea, si es por un minuto de tele, más.
JUAN CARLOS SUÑÉN | He estado viendo «El olvido que seremos», la última película de Fernando Trueba.
No queremos un patronato de protección de las mujeres.
GERMÁN VALCÁRCEL | Hace tiempo que el Bierzo agoniza víctima de una derecha política, social y empresarial extractivista, depredadora, trincona, reaccionaria y clasista, que tiene como levadura ideológica la religión católica, la moral tradicional, la nación española y el Estado autoritario (democracia la justa); una carcunda clasista, desigualitaria, imantada a los privilegios, pero también de una izquierda que convierte su presencia en las instituciones en plataformas de ascenso social y económico, mientras olvida para que fueron elegidos y elegidas.
EDUARDO FERNÁNDEZ | Ya saben ustedes que soy más de frase histórica grandilocuente que de refrán.
GERMÁN VALCÁRCEL | En esta España sumisa y aborregada en la que sobrevivimos, la desconexión con el mundo real, de políticos, elites económicas y sus voceros, es tan extrema que no se podrán tomar soluciones correctas, ante la ignorancia e incomprensión de los verdaderos problemas ecológicos y medioambientales en los que estamos inmersos y la falta de recursos básicos, para el funcionamiento de la sociedad industrial fosilista, a la que estamos abocados.
¿Y qué si nos volvemos locos? Nos recuperaríamos si no nos persiguieran, exiliaran, aislaran o recluyeran.
GERMÁN VALCÁRCEL | Voy a utilizar, en esta ocasión y sin que sirva de precedente, este espacio para hablar de alguien que, desde hace más de treinta y cinco años, forma parte de mi paisaje sentimental, de mi memoria más íntima y de esa retaguardia emocional siempre segura, cálida y acogedora que todos necesitamos para sobrevivir, en un contexto social donde la hipocresía, la envidia, la manipulación, la traicion y la mentira ocupan casi todos los ámbitos de las relaciones sociales.